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Si tu bebé no está en posición

Un embarazo dura aproximadamente 40 semanas desde el primer día del último perio do menstrual. En las primeras 36 semanas, el bebé cambia de posición muchas veces. En las últimas semanas el bebé se mueve menos porque hay menos espacio para moverse. Para la tercera ó cuarta semana antes de la fecha límite, la mayoría de los bebés se mueven de modo que sus cabezas estén hacia abajo cerca del canal de nacimiento (vagina). Si esto no ocurre, los glúteos, los pies, o ambos pueden estar en posición para salir primero durante el parto. A esto se le conoce como presentación posterior. Ocurre en cada 3-4% de los embarazos y requiere un plan especial para el nacimiento. Si tu bebé está en una de estas posiciones, tu ginecólogo puede recomendar realizar una cesárea. La mayoría de los bebés en posiciones posteriores nacen saludables, pero tienen un riesgo mayor de tener ciertos problemas que los bebés que nacen con la cabeza hacia delante. Tu ginecólogo va a hablar contigo sobre el mejor plan para ti y tu bebé.

Factores relacionados
No siempre se sabe por qué un bebé está en una posición posterior. Esta posición es más común cuando:

• La mujer ha tenido más de un embarazo.
• Hay más de un feto en el útero.
• El útero tiene mucho o muy poco líquido amniótico
• El útero tiene una forma irregular o tiene crecimientos anormales, como miomas.
• La placenta cubre toda o parte de la entrada del útero.
• El bebé es prematuro.

En algunos casos, un defecto congénito puede ser una de las razones de por qué un bebé no se ha volteado de cabeza antes de nacer.

Encontrando la posición del bebé
Para planear el alumbramiento de un bebé en posición posterior, tu ginecólogo va a descubrir en qué posición se encuentra tu bebé. Una manera para descubrirlo es realizando un examen físico. Colocando sus manos en ciertos puntos de tu abdomen, el ginecólogo siente la forma del bebé. Al sentir dónde está la cabeza, espalda y trasero, puede decir si el bebé está en una posición posterior y en cuál. Un ultrasonido puede utilizarse para confirmar la posición. En este examen, un aparato se mueve a través del abdomen. Las ondas de sonido que produce crean una imagen del bebé que puede verse en una pantalla. La posición de un bebé puede cambiar hasta el final del embarazo. Conforme se acerque la fecha del parto, algunos bebés se voltean por sí solos. Tu ginecólogo puede no estar seguro si tu bebé se ha asentado en una posición posterior hasta que inicie el parto. A veces una presentación posterior se detecta por primera vez durante un examen pélvico en el trabajo de parto.

Cambiando la posición del bebé
Si el bebé está en una posición trasera o pelvica, tu ginecólogo puede sugerir una versión. Esto es un intento de voltear al bebé de cabeza. Puede mejorar tus oportunidades de tener un parto natural. Para voltear al bebé, el ginecólogo coloca sus manos en ciertos puntos de tu abdomen, y luego empuja o levanta. Esto le ayuda al bebé a moverse. Es como si el bebé girara hacia delante en cámara lenta. Si esto no funciona, el ginecólogo puede intentar hacer que el bebé ruede hacia atrás. En algunos casos, el ginecólogo puede tener a una segunda persona que le ayude a mover al bebé. Frecuentemente, no se intenta la versión hasta que, por lo menos, lleves 36 semanas embarazada. Si se hace antes de este tiempo, el bebé todavía puede cambiar de posición. Tu ginecólogo se va a asegurar de que tu salud y el estado de tu embarazo sean ideales para ver si la versión es una opción para ti. Ciertas condiciones pueden incrementar el riesgo de versión o reducción de la posibilidad de que se realice con éxito. Si tú o tu bebé tiene cualquiera de estas condiciones, tu ginecólogo puede no recomendar la versión. Antes de que tu ginecólogo intente voltear al bebé, se va a realizar un ultrasonido. Este examen va a mostrar:

• Cómo está el bebé colocado.
• Dónde está colocada la placenta.
• Qué tanto fluido amniótico está presente.

El ultrasonido también se puede utilizar para ayudar a guiar el volteo. El ritmo cardíaco del bebé se revisa con el monitoreo fetal antes y después de la versión. Si surgen problemas contigo o con el bebé, se va a parar la versión de inmediato. A veces, se te da una medicina para relajar el útero, de modo que sea más sencillo voltear al bebé. Aunque raros, puede haber complicaciones con la versión:

• Ruptura prematura de membranas
• Problemas con el ritmo cardíaco del bebé
• Ruptura de placenta
• Parto prematuro

La versión se hace, por lo general, cerca de una sala de parto. Si surgen problemas, el bebé entonces puede nacer rápidamente, por cesárea de ser necesario. Más de la mitad de los intentos de versión son un éxito. Algunos bebés, sin embargo, se mueven de vuelta a una posición posterior. Si esto ocurre, tu ginecólogo puede intentar voltearlo de nuevo. Pero tiende a volverse más difícil conforme se acerca la fecha límite. Esto se debe a que, conforme el bebé crece, hay menos espacio para moverse.

Parto
Si tu bebé está en una posición posterior, tu ginecólogo va a hablar contigo sobre el mejor tipo de nacimiento para ti y para tu bebé. Si el bebé puede ser volteado, el parto natural puede ser una opción. Si el bebé está en posición posterior para la fecha del parto, un parto por cesárea puede ser la mejor opción. Tu ginecólogo va a repasar los riesgos y beneficios detalladamente. Juntos van a decidir en el mejor plan para el nacimiento de tu bebé.

Parto natural
El parto natural puede ser más difícil cuando el bebé está en posición posterior. Esto es porque, en el momento del parto, la cabeza es la parte más dura y firme del cuerpo del bebé. En la posición boca abajo, la cabeza sale primero. En la mayoría de los casos, es entonces más fácil guiar el resto del cuerpo a través del canal del parto. En la posición posterior, el cuerpo sale primero, y puede ser difícil guiar la cabeza fuera del cuerpo de la madre. Esto es porque el cuerpo del bebé puede no dilatar el cervix lo suficiente como para permitir que la cabeza salga fácilmente. El riesgo de lastimar al bebé puede incrementarse con un parto natural en posición posterior. También existe más posibilidades de que el cordón umbilical salga primero, lo cual puede parar el flujo del la sangre a través del cordón, causando asfixia y muerte.

Parto por cesárea
La mayoría de los bebés en posición posterior nacen por medio de una cesárea planeada. Como cualquier cirugía mayor, la cesárea involucra ciertos riesgos. Estos problemas ocurren en una pequeña cantidad de mujeres y pueden ser tratados con facilidad:

• Infección.
• Sangrado.
• Problemas relacionados con los analgésicos.

No siempre es posible planear un parto por cesárea. El bebé se puede mover a la posición posterior justo antes del parto. En este caso, no vas a saber si vas a tener una cesárea hasta el momento del trabajo de parto.

En resumen...
La mayoría de los bebés en posición posterior nacen saludables. Si tu bebé sigue en esa posición conforme se acerque la fecha de nacimiento, habla con tu ginecólogo para ver los riesgos de modo que puedan planear el parto que sea mejor para ti.

Fuente: Instituto Mexicano de Infectología Ginecología y Obstetricia y American College of Obstetricians and Gynecologists.

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