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¿Cómo saber que estás próxima a dar a luz?

¿Cómo saber que estás próxima a dar a luz? Planificación
Cuando planeas el nacimiento de tu bebé, puedes tomar medidas para que tu parto sea más fácil. Es importante hacer las siguientes preguntas a tu equipo de atención de salud antes de la fecha del parto:

  • ¿Cuándo debo llamar a mi doctor?
  • Cómo puedo comunicarme con el médico o la enfermera después del horario de consultas?
  • ¿Debo ir directamente al hospital o llamar primero al consultorio?
  • ¿Debo hacer algo especial cuando comiencen los dolores del parto?
Antes de ir al hospital, tienes que pensar en muchas cosas, ya que es muy probable que una vez que comiencen los dolores de parto no tengas tiempo, por eso deja todo planeado por adelantado:
  • Distancia: ¿A qué distancia está del hospital?
  • Transporte: ¿Hay alguien que te pueda llevar o tienes que llamar a alguien?
  • Hora del día: De acuerdo al lugar en donde vives, ¿tardará más en llegar durante hora pico, comparando con otras horas del día o la noche?
  • Arreglos en casa: ¿Tienes que llevar a tus otros niños a casa de alguien que los cuide o tienes que hacer otros arreglos especiales?
  • Arreglos en el trabajo: ¿Tienes un plan para que otra persona atienda tus tareas en el trabajo y para informar a tus compañeros a dónde has ido a dar a luz?
Es una buena idea hacer un recorrido previo al hospital para ver cuánto te tardas en llegar. Planea una ruta diferente para llegar al hospital en caso de que haya retrasos en la ruta habitual.

¿Cómo comienzan los dolores de parto?
Nadie sabe exactamente qué causa que inicien los dolores de parto, pero es posible que los cambios hormonales desempeñen un papel importante. La mayoría de las mujeres se dan cuenta cuándo han comenzado los dolores de parto, pero a veces es difícil saber con exactitud.

Cuando comienzan los dolores de parto, el cervix se dilata y el útero se contrae a intervalos regulares. Cuando se contrae, el abdomen se endurece. Entre las contracciones, el útero se relaja y se ablanda. Incluso hasta el comienzo de los dolores de parto y durante el comienzo del parto, el bebé continuará moviéndose. Otros cambios también pueden señalar que han comenzado los dolores de parto. Puede o no sentirlos antes de que comience el trabajo de parto.

Comparación de los dolores de parto con los síntomas falsos
Es posible que sientas síntomas falsos que no indican el comienzo del parto, contracciones irregulares del útero, antes de que comiencen los dolores verdaderos. Estos síntomas reciben el nombre de contracciones Braxton Hicks. Son normales pero a veces pueden ser dolorosas, y con frecuencia se sienten más al final del día.

Es difícil diferenciar los dolores de parto de los síntomas falsos. Por lo general, las contracciones falsas son menos regulares y no tan fuertes como los dolores de parto. A veces la única manera de saber la diferencia es a través de un examen vaginal para detectar los cambios en la cerviz que indican el comienzo del parto.

Un buen método para identificar los dolores de parto verdadero es calcular el tiempo entre una contracción y otra. Observa cuánto tiempo pasa desde el comienzo de una contracción hasta el comienzo de la siguiente. Anota los tiempos durante una hora. Puede resultar difícil tomar el tiempo con precisión si las contracciones son leves. Si piensas que tienes dolores de parto, llama al consultorio del ginecólogo o al hospital.

Debes llamar o ir al hospital si sientes cualquiera de los siguientes síntomas:
  • Se rompe la bolsa de líquido amniótico, aunque no tengas contracciones.
  • Estás perdiendo sangre de la vagina, sin ser secreciones con sangre.
  • Tienes dolor agudo y constante, sin alivio entre contracciones.
  • Sientes que el bebé se está moviendo con menos frecuencia.
Resumiendo...
Estás por vivir un momento muy importante en tu vida. Aunque no es posible saber cuándo comenzarán los dolores de parto, puedes estar lista si sabes qué esperar. Si estás preparada, se te hará más fácil relajarte y concentrarte en el nacimiento de tu bebé cuando llegue el momento.

Fuente: Instituto Mexicano de Infectología Ginecología y Obstetricia y American College of Obstetricians and Gynecologists.

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